No es difícil perder la cuenta de cuántas contraseñas tenemos definidas en estos tiempos que corren. Mínimo tenemos una para Educa, otra para el correo de Educación, otra para nuestra cuenta personal, para la WIFI, el PIN del móvil, y así un largo etcétera. En muchos supuestos, necesitaríamos una memoria excelente para acordarnos de todas ellas, por lo que a veces utilizamos una misma contraseña para varios accesos a sabiendas de que como nos descubran una el resto caerán también. Otras personas prefieran apuntarlas en una hoja de papel o en un documento de texto, facilitando aún más la labor de quienes se apropian de lo ajeno. Sin ir más lejos, recientemente fue hackeado todo el servidor de un centro educativo porque alguien había apuntado todas las contraseñas en un documento de Google Drive.
A continuación vamos a enumerar algunas soluciones para guardar nuestras contraseñas de forma segura:
1Password
1Password es un gestor de contraseñas bastante popular. Tan sólo debemos recordar una contraseña principal o utilizar nuestra huella digital (en dispositivos compatibles) para tener acceso de forma segura a contraseñas de distinta naturaleza: base de datos, contraseña, cuenta bancaria, cuenta de correo electrónico, identidad, inicio de sesión, licencia de software, licencia exterior, miembro, nota segura, número de la seguridad social, pasaporte, permiso de circulación, programa de bonificaciones, router inalámbrico, servidor y tarjeta de crédito.
Es una app gratuita para dispositivos móviles Android y con sistema iOS de Apple. Las versiones de escritorio para Windows y para Mac son de pago. Está disponible en castellano y con las últimas versiones se ha mejorado bastante su rendimiento en general.
LastPass
Esta aplicación recuerda y completa por ti las contraseñas de tus páginas web y otros servicios, incluso archivos. Los protege con encriptación AES-256 y una contraseña maestra. Funciona prácticamente igual que 1Password aunque es necesario registrarse e iniciar sesión para empezar a utilizar la herramienta, y las opciones de configuración no son tan intuitivas.
LastPass tiene una versión gratuita, totalmente funcional con la mayoría de los sistemas operativos y dispositivos móviles, y otra de pago.
Dashlane
Es otra alternativa que hasta hace poco tiempo era solamente de pago. Permite almacenar contraseñas de inicios de sesión que se pueden agregar o bien escribiéndolas una a una, o bien utilizando extensiones para navegadores. Sincroniza tu información confidencial con otros dispositivos configurados.
Dashlane está traducido también a castellano y administra de forma más directa un billetero virtual.
No te convence ninguna de las soluciones anteriores. Puedes consultar el siguiente artículo de A Secure Life donde hacen un análisis más exhaustivo de las aplicaciones enumeradas anteriormente, así como de otras alternativas.